Los ministros de Economía de la Unión Europea han adoptado un mecanismo para resolver los conflictos por doble imposición. Se trata de un sistema vinculante en el que árbitros independientes dirimirán las disputas cuando dos países reclamen impuestos a un contribuyente por los mismos ingresos. La nueva normativa prevé un procedimiento de acuerdo mutuo que sería iniciado por el pagador de los impuestos, bajo el que los países pueden alcanzar un acuerdo en el plazo de dos años.
Si el acuerdo entre los dos países fallara, se aplicaría un procedimiento de arbitraje para resolver la disputa en un plazo determinado y para esto se nombraría un panel compuesto por tres árbitros independientes, junto a dos expertos de cada país en disputa. El objetivo es que esta nueva normativa permita resolver las disputas en plazos razonables y a través de mecanismos obligatorios y vinculantes, para atajar la falta de eficacia del sistema de arbitraje actual.
El hecho de que los Estados miembros puedan cobrar impuestos dos veces sobre los mismos ingresos o capitales, además de crear una carga de tasas excesiva, genera obstáculos a los negocios entre países de la UE. El visto bueno de los titulares económicos de los Veintiocho era el último paso necesario para que la medida, que requería la aprobación por unanimidad, pueda entrar en vigor, puesto que la Eurocámara ya dio su visto bueno.
Entre las cuestiones aprobadas se encuentran los criterios para nombrar a estos árbitros independientes, que no podrán ejercer este puesto si son empleados de asesorías fiscales o se han dedicado de forma profesional a la asesoría fiscal. El presidente del panel tendrá que ser un juez salvo que los Estados acuerden lo contrario.
Los países tendrán ahora un periodo de casi dos años, hasta el 30 de junio de 2019, para incluir en sus legislaciones nacionales la nueva directiva, que se aplicará a casos de doble imposición notificados tras esa fecha y que hayan tenido lugar a partir del 1 de enero de 2018.